2.5. Industria de entretenimiento y medio de información.
Gran parte de nosotros disponemos de una televisión, un aparato lleno de cualidades que nos entretiene, nos informa, nos hace reír…etc. Este aparato se ha instalado en nuestros hogares como un miembro más de la familia, ocupando el epicentro del núcleo familiar. Tanta es su influencia que sociólogos, piscólogos, pedagogos, periodistas… han realizado múltiples estudios sobre si la televisión influye en nuestro comportamiento, nuestros gustos, las modas, los hábitos, la violencia, el sexo, nuestra ideología política.
La televisión es algo que está ahí, no se puede esquivar, y va seguir estando ahí. Por ello, hay que saber seleccionar entre la amplia oferta de contenidos que nos ofrece, y los más vistos son: deportes, con comercial, programas “rosa” estilo Sálvame, entrevistas a personajes conocidos, programas de música, Sit-coms con risa enlatada… etc. Dentro de todos estos contenidos podemos encontrar efectos perniciosos para la sociedad y en numerosas ocasiones la franja que separa lo real del espectáculo es muy estrecha, por ejemplo podemos ver imágenes de un huracán que ha arrasado x país y al minuto estamos viendo nuestro show humorístico, sin apenas dejarnos tiempo para procesar la información.
Para evitar todos estos efectos negativos, es necesario reflexionar y hacer un uso racional de los medios de comunicación y el entretenimiento, escogiendo aquellos contenidos que vayan a contribuir en nuestro bienestar o que simplemente nos sirva para evadirnos después de una larga jornada de trabajo o de estudio.
http://revista.consumer.es/web/es/19981001/interiormente/32047.php