2.5. Industria de entretenimiento y medio de información
Una vez más, me dispongo a escribir una nueva entrada en el blog, pero esta vez con algo más claro en mente. Ahora sí que me interesa el tema del máster de Cristina Cifuentes. De hecho, escribo esta entrada el mismo día de la comparecencia de la presidenta de la Comunidad de Madrid ante la Asamblea en la que intentará demostrar a la oposición que la obtención de su máster en Derecho Público del Estado Autonómico de la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid (URJC) ha sido totalmente legal y real, cosa que no parece convencer ni a la oposición ni a los diarios digitales. Contra estos, la Presidenta planea interponer una querella que se está haciendo tanto de rogar como la aparición de su trabajo fin de máster (TFM).
Esta entrada tiene más que justificada su relación con la televisión, puesto que, aunque la noticia surge en los diarios digitales, el tema del máster de Cifuentes viene acaparando muchas horas de emisión en diferentes programas de televisión.
De hecho, y debido a un esguince de rodilla que he sufrido durante las vacaciones de Semana Santa, he debido guardar reposo en casa, lo que me ha permitido buscar en internet o “hacer zapping” por la televisión y ver programas que no suelo ver o, incluso, algunos otros de los que no sabía de su existencia. Y la sorpresa que me he llevado ha sido que la indiscutible “reina de la televisión” en la mañana de hoy, 4 de abril de 2018, ha sido, ni más ni menos, Cristina Cifuentes, que lleva 14 días en su despacho de la Puerta del Sol igual de desaparecida que su TFM.
Programas de actualidad, como son Al Rojo Vivo o El Intermedio, ambos emitidos en la Sexta, retransmitían debates e investigaciones sobre el máster de Cifuentes y el desprestigio debido al escándalo de la propia universidad implicada. Así, en la URJC, el presunto director de máster de Cifuentes ha reunido a las docentes responsables de las firmas del acta, al parecer falsa. La reunión podría deberse a un intento de pactar una versión común a la hora de justificar el entuerto ante la CRUE, que llevará a cabo una investigación universitaria interna para determinar si Cifuentes gozó de un trato de favor.
Está claro que, en el caso de demostrarse que dicho título es falso o que su obtención se realizó de manera irregular, se trataría de un delito más de corrupción de un miembro del PP, corrupción institucional, quizás, pero corrupción, al fin y al cabo.
Pero todo este tema me hace pensar en el origen de esta situación. No puedo evitar reflexionar sobre la probable politización a la que las universidades de la Comunidad de Madrid, sobre todo, están sometidas. Efectivamente, tanto por un lado, ya que se dice que la URJC es la universidad del PP, como por el otro, cuyo ejemplo más claro sería la Universidad Carlos III de Madrid (UC3M), identificada con el PSOE, se habla de politización de estas instituciones. Estas y otras declaraciones del estilo las daba ayer en El Intermedio un profesor catedrático de la URJC, cuyo enlace os dejo más abajo.
En fin, con esto quiero decir, y ya para terminar, que el gran problema y origen de toda esta situación y de otros muchos casos que ni siquiera se conocen es la más que probable politización indebida de una institución educativa que tendría que tener autonomía propia para poder desligarse de la política. De esta manera, podría centrarse en ofrecer el mejor servicio posible a los estudiantes, sin tratos de favor a ninguno de ellos, sean o no personalidades relevantes o que pertenezcan o no a un determinado partido político, credo o religión.
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